24 Apr 2023
Hemos vivido una experiencia inolvidable!
Iniciamos el viaje en Marrakesh, allí nos recogió un chofer en el aeropuerto, y nos condujo hasta un Riad con encanto en el centro de la Medina, el Riad era espectacular, tenía piscina, y una terraza desde la que se divisa la ciudad
Nos dieron una cálida bienvenida con té y pastas, y fueron muy amables con nuestra hija de 5 años.
Al día siguiente tuvimos ocasión de descubrir la ciudad a través de un guía oficial, que nos enseñó los rincones más especiales de la Medina, y por la tarde paseamos por el centro en calesa.
Desde allí partimos hacia el desierto, a través del Atlas, disfrutando del paisaje y la gastronomía, hicimos noche en un Kassar, 100% recomendable, también con piscina, en el que disfrutamos de la comida y el descanso, especial mención merece el desayuno con el que nos despidieron, digno de un hotel de gran lujo
A la mañana siguiente, continuamos hasta el desierto, al que llegamos por la tarde, desde que nos bajamos del coche tuvimos una experiencia excepcional, el paseo en dromedario hasta el campamento fue irrepetible, hicimos un descanso a mitad de camino, y allí pudimos disfrutar de las vistas y las dunas, haciendo fotos y saltando y corriendo por la arena, mi hija recuerda ese día como uno de los mejores de su vida!
Tras ese descanso, continuamos hasta el campamento lleno de jaimas a las que no le faltaba detalle, he de decir, que cuando llegamos quedamos sorprendidos por el paraje y por las comodidades que ofrece. A la mañana siguiente disfrutamos de la experiencia completa, gracias a una tormenta de arena! Que no nos impidió seguir nuestra ruta por el desierto hasta un campamento nómada, gracias a la pericia de nuestro chofer; ese día también visitamos unas antiguas minas de plomo y pudimos probar algo tan autóctono como la carne de dromedario
Después de disfrutar a tope la experiencia, pusimos rumbo a Fes, la ruta en coche fue espectacular, por lo variado de los paisajes, y lugares pintorescos
Ya en Fes, nos alojamos en un céntrico Riad con piscina en la azotea con vistas a toda la ciudad! También pudimos hacer la visita de la ciudad con guía oficial, que nos enseñó una fábrica de cerámica típica de la ciudad, y el trabajo artesanal que realizan con las pieles.
Y desde Fes volvimos a España.
Todo el viaje lo hicimos con chofer, en un todoterreno cómodo y espacioso, y con un chofer encantador, que tuvo mucha paciencia con nuestra hija
María nos asesoró antes del viaje, anticipándose a nuestras necesidades, y adaptándonos el viaje a nuestras preferencias y gustos, máxime al viajar con niños pequeños, también nos informó de forma muy personal, sin importar horarios, para que lográramos disfrutar de una experiencia irrepetible
Hemos quedado encantados y muy agradecidos por todo.... volveremos!!!