16 Mar 2021
La playa a la que nos llevaron bajo el supuesto de que era una "playa virgen" es una playa simplemente horrible: llena de gente (incluso lanchas parqueadas con música a todo volumen) , sucia y fea. Nos dieron sombrillas para reposar en el sol pero fue imposible instalarlas y una vez allá, no hay ninguna forma de comunicación con el exterior. Quedamos atrapados bajo el sol y sin una pizca de sombra disponible, lo que le costó una insolación a mis compañeros. Fue tal el desespero que le pagamos a unos pescadores para que nos sacaran de allá. El precio que cobraron fue de 100,000 COP por persona, lo cuál para el plan me pareció absolutamente exagerado. La señora que nos vendió el plan fue completamente grosera y poco receptiva.
Tal vez lo único bueno para destacar fue la amabilidad del guía y la caminata que a pesar de no ser muy bien dirigida, estuvo bien.